sábado, 12 de marzo de 2011

Caso: Historia de una aventura

La vida le jugó más de una mala pasada a Marino Pareja. Pero con paciencia y espero en su trabajo, supo torear las vallas. Hoy es dueño de la Pastelería Cosmos que produce diariamente ocho mil panes y 60 tortas.

El terrorismo dejo marcas imborrables en los peruanos. Pero fueron los pobladores de Ayacucho los que vivieron de cerca la demencia terrorista. Uno de ellos fue Marino Pareja Quispe (39).

Pero la violencia terrorista extendía sus tentáculos. En 1990, migra a Lima con su familia. Hace de todo para agenciarse dinero. Vende caramelos y chocolates. Y en una de sus tantas travesías visita a su primo que vivía en Villa El Salvador.

"Vi en un rincón un horno a gas, entonces le dije a mi primo: por qué no hacemos pan". Marino trataba de buscar algo más estable. Él pese a los contratiempos económicos, guardó S/. 300.

"Pensé que era fácil. Pero así empezó la aventura de mi vida". Observo como se hacían los panes. Tiempo después, el exceso de alcohol le jugó una mala pasada a su primo. "Fracasamos tres veces, pero yo seguía". La perseverancia rindió frutos, pero tuvo que dejar el negocio. "Mi primo tomo el control del negocio".

A Marino no le importó, pues él dice que se llevó lo más importante: conocimientos. Juntos a sus hermanos armó un horno a ladrillos. Todo iba bien, pero las discusiones eran cada vez más fuertes.

Cuando aún estaban en proceso de crecimiento, trabajaban a brazo partido, tanto que tuvieron dos panaderías y un minimarket. "Me dio pena dejar mi esfuerzo", sus hermanos se hicieron cargo de los negocios y él empezó el suyo. Ahora no solo tenía conocimientos. Se hizo de contactos con proveedores, entre ellos Alicorp, que lo ayuda a capacitarse.

En esta nueva etapa empezó con US$6,000 y con el tiempo cuenta con maquinaria de pastelería valorizada en US$45,000. Ya no está solo. Hay bajo su mando 18 personas. A diario elabora cerca de ocho mil panes y 60 tortas.

Marino quiere que su pastelería Cosmos se consolide "Quiero que las personas que trabajan conmigo sepan atender a las personas y a amar lo que hacen"
 
Fuente: Diario Gestión, sección "Si se puede"
Después de haber leído el caso de éxito de Marino Pareja y su pastelería Cosmos publicado en la sección Agenda Personal del diario Gestión, responder las siguientes preguntas:
  1. ¿Qué características de Marino lo convierten en un emprendedor?
  2. ¿Cuál de las características de Marino crees que fue crucial para que su negocio sea exitoso?
  3. Respecto a las características empresariales desarrolladas en el libro de texto, ¿Cuáles crees que tiene Marino y cuál crees que fue crucial para el éxito de su negocio? ¿Por qué?
  4. ¿Qué características empresariales crees que podría desarrollar? ¿Por qué?
  5. Menciona aquella parte del texto en que se evidencia la perseverancia de Marino.
  6. ¿En qué momento del texto se muestra la búsqueda de oportunidades?

Caso: Cebollas

Lee atentamente el siguiente testimonio del empresario Fortunato Márquez, el cual salió publicado en el libro "Rostros del Comercio Exterior" y responde las siguientes preguntas.
  1. ¿Dirías que el señor Márquez es emprendedor? ¿Se podría considerar como un pionero?
  2. Basado en lo que cuenta con respecto a su vida, ¿cuál dirías que es la actitud del señor Márquez con respecto al riesgo y a la incertidumbre? ¿Le ha resultado provechosa dicha actitud?
  3. De lo que puedes leer en el texto, ¿qué tan importante crees que consiera el señor Márquez el estar siempre informado? ¿En qué momentos del texto se evidencia esto? ¿Qué tan importante para su éxito crees que ha sido?
  4. Perfil del empresarioRepasa las características empresariales. ¿Cuáles dirías tú que el señor Márquez tiene y ciáles le recomendarías desarrollar? ¿Cuáles consideras que fueron cruciales para su éxito?
  5. Repasa los rasgos empresariales recomendados por el Consejo Nacional de Educación Económica de los Estados Unidos. ¿En qué nivel dirías tú que el señor Márquez tiene cada rasgo? ¿Cuáles consideras que fueron cruciales para su éxito?

ALIMENTO MILENARIO
Su instinto natural para los negocios lo guió hacia el verdadero camino del éxito: la exportación a gran escala a Estados Unidos y Europa. Su crecimiento no se detiene.
A diferencia de lo que ocurre al común de los mortales, la cebolla no hace llorar a Fortunato Márquez. Al contrario, sobre esta hortaliza milenaria –se dice que su historia se remonta a 3,500 años de antigüedad –este personaje ha construido un negocio que lo ha convertido en el “Rey de la cebolla”, y así se le conoce en el agro nacional. Auténtico miloficios de nuestros días. Fortunato ha probado suerte como ambulante, vendedor de abarrotes e inversionista en la Bolsa de Valores. Pero fue con la agroindustria en donde logró echar raíces para hacer crecer una historia de prosperidad.
Fortunato Márquez.

Fuente: Rostros del Comercio ExteriorNací en Ancash, en pleno Callejón de Conchudos. Mi familia era muy pobre, así que mi padre decidió enviarme muy joven a Lima para que aprendiera una profesión. Ni bien llegué a la capital encontré trabajo en una fábrica de bicicletas. Después me dediqué a vender tomates y frutas en una esquina del Mercado Central de Lima. Eso fue en el año 75. Me di cuenta que el negocio estaba en los abarrotes. Con mis pocos ahorros compré un espacio en el mercado de Canto Grande, donde vendía azúcar, arroz y todo tipo de abarrotes. Al mismo tiempo, estudiaba administración en un instituto en el centro de Lima. Estuve hasta tercer ciclo. Allí aprendí cómo abrir una bodega, cómo tramitar una licencia municipal, en qué podía invertir. También aprendí que era mejor llevar las compras a los domicilios de mis caseras, así me preferían. Ahora eso se llama delivery. Al poco tiempo pude comenzar a vender al por mayor. Como siempre estaba ahorrando, junté capital y pude comprar un terreno grande en una esquina del mercado de Canto Grande, con la idea de hacer un gran almacén y vender abarrotes al por mayor.
Le puse su techo de calamina y un rótulo que decía “Súper Market – Mayorista”. Como el negocio creció pude contratar a mis paisanos que también migraban a Lima. En 1987 ingresé a la Universidad Federico Villarreal para estudiar administración de empresas. Por esa época me animé a invertir en la Bolsa de Valores. Con las ganancias me compré otro terreno en Canto Grande. Allí puse una pollería y tres farmacias. Luego abrí cuatro locales más en el centro de Lima y un hostal en Canto Grande. Así diversifiqué mis inversiones. De la ciudad al campo.


Una noche vi en un programa de televisión que Chavimochic era una buena alternativa para la agroexportación. Al día siguiente compré mis bases y me asesoré con un economista para participar en una subasta. Me adjudiqué 57 hectáreas para sembrar espárragos. Vendí todas las propiedades que tenía en Lima, incluyendo mi casa, para desarrollar el negocio. Pude reunir cerca de 250 mil dólares.
Fuente: Rostros del Comercio ExteriorComo el espárrago tenía un precio internacional estable desde hacía 10 años, opté por sembrar ese cultivo. Antes instalé mis equipos de riego por goteo y preparé el terreno. La primera cosecha fue buena; en la segunda perdimos dinero porque el precio del espárrago cayó de 7 a 2.80 dólares. China había ingresado a los mercados internacionales con un espárrago verde de bajo precio.
Todos en Chavimochic perdimos. Me asesoré y decidí cambiar el espárrago fresco por el blanco. Fue un éxito porque el precio de este cultivo era bueno. La lección del espárrago me enseñó que tenía que diversificar. Sabía que el consumo de alcachofa, espárrago verde, cebolla y otros productos había logrado aceptación en Europa.
Elegí la cebolla porque supe que en los meses de agosto, setiembre, octubre y parte de noviembre, los agricultores de México, Costa Rica y Chile – que abastecen al mercado internacional – no tienen cosecha y se eleva el precio en Estados Unidos y Europa.
Planifiqué mi siembra para que mis cosechas de cebolla se inicien en agosto y así lograr que la venta me favorezca. Lo hice y ahora cosecho cebolla en los meses que otros países no pueden producir. Reuní un equipo de ingenieros agrónomos que lograron clonaciones de cultivos de cebolla roja y amarilla. Ahora, nuestra producción en cada campaña es de 60 toneladas métricas por hectárea. Exporto a Estados Unidos, España, Ecuador, Colombia y Venezuela.

La cebolla es la hortaliza de mayor importancia económica mundial después del tomate. Se utiliza como alimento, condimento y hasta como medicina. La demanda mundial por este producto presenta una tendencia creciente. Nuestra perspectiva a corto y largo plazo es tener nuestra propia marca para comercializar nuestros productos en el mundo. Ahora tengo 133 hectáreas más. La mayor parte está destinada a cultivar cebolla, pero mantengo un área para los espárragos.
He tenido que implementar tecnología de riego para elevar la productividad y, de esta manera, reducir mis costos, porque en la agricultura se tiene que usar tecnologías modernas, investigar mercados y contar con equipos para tener una agricultura igual o mejor que la europea o americana.
Con los bancos no tengo problemas, todos confían en mis productos. He logrado hacer una maestría en Producción Agrícola. Planifico mi trabajo, hago estudios de mis cultivos y mercados. Es importante que el propio empresario conozca lo que produce y que está en el campo todos los días. Ahora me dicen “El Rey de la Cebolla”. Es que en el Valle de Virú hemos superado la producción de Arequipa. En mi fundo producimos una variedad de cebollas que hemos logrado obtener después de varios injertos y que ahora tiene buena aceptación en los mercados de Estados Unidos y Europa.
Texto extraído de la revista "Rostros del Comercio Exterior" publicada por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, enero 2005.

Caso: Muebles Maldonado

Lee atentamente el siguiente testimonio del empresario Encarnación Maldonado Luyo, el cual salió publicado en el libro "Emprende Empresa" y responde las siguientes preguntas. Envìa tu respuesta al correo jovi18966@gmail.com.
  1. Considerando lo que el Sr. Maldonado cuenta con respecto a su vida, ¿a partir de qué momento dirías que es un empresario? ¿Por qué?
  2. ¿Qué servicio le está brindando la empresa del Sr. Maldonado a la sociedad? ¿Es la sociedad ligeramente mejor porque dicha empresa existe? ¿Cómo afecta a la sociedad?
  3. A lo largo de lo que cuenta el Sr. Maldonado cuáles son las fortalezas y las debilidades de su empresa, así como las oportunidades que ha tenido y las amenazas que tiene.

SI GANAS EL ÉXITO, DISFRÚTALO, SI TE TOCA PERDER, AFRÓNTALO
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Encarnación Maldonado Luyo – Muebles Maldonado
La historia de superación de Encarnación Maldonado comienza hace muchos años atrás. Llegó de su pueblo natal San Juan de Zúñiga, Cañete, a los 16 años de edad. Deseaba buscar una nueva aventura, encontrar mejores horizontes para forjarse un futuro. Siempre oía comentar mucho sobre la capital pero no la conocía. Entonces le pidió a su padre que lo llevara para visitarla pero sin la intención de quedarse.
Un 8 de diciembre su padre le dijo para ir a Lima. Se alistó con la algarabía propia de un muchacho contento. Media hora antes de partir, al abordar el ómnibus a Lima, su padre le dio la noticia que ya tenía trabajo estable para él en Lima: lo había encontrado por intermedio de unos familiares. En ese mismo momento, desistió de viajar.
Sus padres le hablaron, le dijeron muchas cosas. Era una familia de una condición muy humilde, pasaban muchas necesidades y buscaban una oportunidad para él. Lo convencieron a medias y, a regañadientes, tomó el bus para Lima. En el transcurso del camino de San Vicente de Cañete a Lima, comenzó a analizar todas las palabras que sus padres le expusieron.
En Lima comenzó a trabajar en la avenida Luna Pizarro en La Victoria. Tuvo que dejar ese trabajo por motivos de salud y se fue a vivir a la casa de un pariente. Maldonado es una persona que siempre se ha considerado líder, con deseos de superación. Desde muy joven le gustaba salir adelante y no se sentía bien comiendo ahí prácticamente gratis. Entonces comenzó a trabajar: vendió escobas y mazamorra. Tenía que buscárselas en beneficio de su familia.
Así siguió por un tiempo, hasta que se inició en la carpintería de un tío para hacer acabados. Un amigo maestro, le dio la oportunidad de practicar en otros muebles y a la semana ya se forjaba como todo un maestro, dado que aprendió muy rápido la labor de acabado. A los quince días una señora, que mandaba a pintar a la carpintería sus muebles para el acabado, lo encontró trabajando, y le aconsejó: “Maldonadito, ¿por qué no trabajas solo? Me doy cuenta que tú estás haciendo todo el trabajo.” Él le dijo: “Señora, no tengo maquinaria, no tengo dinero, no tengo nada.”

Ella le contestó: “No te preocupes, hazlo con lo que puedas, la próxima semana vamos a comprarte un pequeño compresor, y lo que sea necesario, para el trabajo de acabado.”Así fue como se inició de la nada y empezó a forjarse poco a poco un futuro. Utilizaba poco la compresora: aprendió a hacer acabados para diferentes tipos de muebles de manera manual y quedaban mucho mejor que con la maquinaria. Se vio obligado a buscar ayudantes para seguir trabajando. A los dos años, tenía un pequeño taller con quince colaboradores. Brindaban servicio de acabados a distintos clientes que siempre volvían a requerir su servicio porque se esmeraban en dar un acabado especial para la satisfacción de cada uno. El único capital que tenía fue la enseñanza que le transmitieron sus padres. Las palabras de sus padres a su partida, todas las virtudes, las enseñanzas, fue lo que lo hizo salir adelante.
El talento que tiene está en la creatividad y la destreza de sus manos. Habilidad y creatividad aplicada a los diseños y estilos. Siempre le gustó buscar, crear y generar su propio diseño, su propio estilo, para tratar de salir adelante. Es un hombre que no tuvo la oportunidad de pisar un instituto, una academia o una universidad. Solamente estudió la primaria, en una escuela rural de su tierra. Cuando fue a Lima, trató de estudiar de noche. Sin embargo la obligación que tenía con sus hermanos no se lo permitió. Se dedicó a trabajar solamente para ayudar a sus hermanos y a su familia.
El éxito de su negocio se basa en muchas horas de esfuerzo y sacrificio. A los 25 años, había conseguido formar un taller en el distrito de San Luis pero, por una mala administración, tuvo un duro traspiés que lo hizo perderlo todo. Nunca tuvo una capacitación profesional para poder administrar su negocio.

Maldonado agradece el apoyo que siempre he tenido de su esposa en los buenos y en los malos momentos de su vida. Justamente en el año que se casaron fue que perdió todo el negocio. Les tocó vivir tiempos de dura crisis económica. Tuvo que vivir 5 largos años sin saber dónde centralizarse. Buscó una y otra alternativa, pero no la encontraba. Llegó a alquilar cuartos, pero siempre lo sacaban, porque no le alcanzaba para cubrir la renta.
Pero llegó un día en que pensó que si una vez lo hizo y lo tuvo, lo podía hacer de nuevo. Con esta idea en la cabeza se propuso buscar, nuevamente cómo generar una empresa. Para Maldonado, la innovación y la creatividad llevan al camino de la excelencia. Llegó a Villa El Salvador, a la casa de unos amigos, sin plata, pero con muchos deseos de salir adelante. Había llegado con 20 soles en el bolsillo y sin ninguna herramienta. Un primo suyo le alquiló su local y sus herramientas. Así empezó, desarrollando nuevos modelos de sillas y mesas. Hizo cuatro modelos especiales que llevó al distrito de Surquillo a ofrecerlos a una clienta. A ella le gustaron y le dijo: “¿Por qué no me has traído más?” “Señora, la verdad es que no tengo dinero con qué fabricar más” – le confesó. Ante su sinceridad la señora le propuso: “No te preocupes, hazme 18 sillas, te voy a pagar la mitad por adelantado, y el resto cuando me las entregues.” Esta es otra de las partes básicas del éxito de un empresario: hablar siempre con la verdad.
Volvió nuevamente a impulsarse y a motivarse, volvió a hacer sus propios modelos, nuevos estilos y generar sus propios diseños. Siempre ha tenido la estrategia de no ofrecer jamás los mismos diseños a dos o tres distribuidores: creaba un modelo para cada distribuidor. De esta manera cada uno vendía sus modelos exclusivos. Fue creciendo bajo esta estrategia y llegó a tener la oportunidad de vender en todos los distritos de la capital. Por otra parte siempre buscó la materia prima de primera calidad, para que de esa manera el público se sienta contento, regrese y los recomiende a otros.

Actualmente, cuenta con una planta en Villa El Salvador. Quizás no trabaja con tecnología de punta, pero sí hace muchos esfuerzos para tratar de salir adelante. Uno de sus primeros objetivos es la innovación en maquinarias para llegar a tener una gran planta en el Parque Industrial. En el Parque Industrial, además, tienen cuatro tiendas como puntos de venta. En una de ellas se encuentra la tienda principal.Su objetivo a mediano plazo, es entrar al mercado exportador. Para eso se están preparando, equipando su planta con moderna maquinaria.
Es consciente de que para entrar al mercado extranjero debe unirse con varios para formar una corporación. Es la manera de entrar a competir al mercado internacional que es muy exigente.
Muebles Maldonado está dividido en dos áreas: área de producción y área comercial. El área de producción es desde donde siempre está buscando la innovación: la forma de crear nuevos modelos e introducir nueva materia prima, para estar acorde con las exigencias del mercado. Una de las formas de trabajo son las reuniones de aprendizaje que hacen cada quince días, o una vez al mes. En estas reuniones, con todo el personal que trabaja, buscan nuevas alternativas, para mejorar sus productos.
Maldonado recomienda que si uno gana el éxito, hay que disfrutarlo y si toca perder, hay que saber afrontarlo. Es la única manera de superar lo perdido.
Texto extraído del libro "Emprende Empresa" publicado por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo y la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos, 2004.